Este CURRICULO INTEGRADO, que impartiríamos en la Escuela Pública, exige a la Administración Educativa HABILITAR en la propia Ley, al  Profesorado de Religión que, dentro del Currículo de Religión, va a impartir la Educación en Valores Cívicos, Éticos y la Educación para la Ciudadanía y Derechos Humanos, resolviendo así el vacío legal actualmente existente, por el que, aunque se le considera al profesorado de Religión EMPLEADO PUBLICO, miembro del Claustro a todos los efectos, sólo puede impartir Religión confesional, cuando con la HABILITACIÓN para impartir también la Educación en Valores, estabilizaría su CONTRATO INDEFINIDO, CON SU JORNADA LABORAL FIJA, compuesta de las HORAS LECTIVAS DE RELIGION y completadas con ACTIVIDADES EDUCATIVAS que pueda cubrir en el Centro Educativo en el que está destinado, en caso necesario, tal y como ocurre en las Ciudades Autónomas de Ceuta y Melilla. 

Si buscamos CALIDAD EDUCATIVA para las nuevas generaciones,  Gobierno e Iglesia y las otras confesiones religiosas deben llegar cuanto antes a un PREACUERDO para incorporar esta FORMULA ORIGINAL a sus negociaciones, ya que supone un avance cualitativo respecto a la fórmula de la LOMCE y en las relaciones Iglesia-Estado, supone el compromiso de cooperar las instituciones, y, en el caso del alumnado, prestando el mismo servicio a todos, desde el respeto a su libertad religiosa y de conciencia.

El Cardenal Arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, criticaba "los constantes vaivenes legislativos" en materia de educación y defendía el derecho de las familias a elegir el modelo educativo para sus hijos, incluida la enseñanza de la asignatura de religión. "Con buena voluntad, se pueden encontrar muchas FÓRMULAS posibles que garanticen la libertad de las familias para escoger el proyecto pedagógico que prefieran".

Aquí ofrece APPRECE una fórmula que puede facilitar la CONCORDIA y  la FRATERNIDAD,  evitando la radicalización de las posturas sobre las enseñanzas de Religión.

Saludos de, 
José Mª Guardia Sierra Presidente de UNION APPRECE ESPAÑA. SINDICATO APPRECE