La comunidad educativa castellano-manchego no da crédito. En unos meses el Gobierno de José María Barreda quitará de las aulas, de golpe, 28.500 portátiles.

Según cuenta La Gaceta este sábado, ello se debe a que la Junta firmó en julio de 2008 un contrato para alquilar durante tres años esos ordenadores por 20 millones de euros, al módico precio de 700 euros cada uno.

Se trató de una operación de arrendamiento sin opción a compra, de forma que ahora toca devolverlos. "Un alquiler sale mucho más caro que cualquier compra. La Junta mintió, ya que anunció que había adquirido esos portátiles y el Boletín Oficial de la comunidad demuestra que se trata de un mero alquiler sin opción a compra, es decir, que no cabe la posibilidad de sustituir los modelos anticuados por otros más actuales, como en todo leasing", denuncia la diputada autonómica del PP María Crespo en las páginas del diario.

Para los profesores de la región, llueve sobre mojado. Ya antes de esto estaban de por sí enfadados con Barreda porque su Ejecutivo no va a convocar oposiciones para este año. Ello contraviene una sentencia del Tribunal Supremo que obliga al Gobierno autonómico a convocar más plazas que el mínimo del 3%. 

                   Castilla-La Mancha, 5 de marzo de 2011